Los beneficios de tener una terma a gas en casa

Hoy que hablamos de ahorro, tenemos que optimizar nuestro consumo eléctrico para que nuestro recibo de luz disminuya.
 

Los calentadores  o termas a gas ya se están vendiendo en sistemas duales tanto para gas natural (GNV) como para gas licuado de petróleo  (GLP). Sus ventajas son el reducido tamaño, su gran seguridad y su bajo costo de servicio. 

Los calentadores a gas permanecen apagados sin gastar el gas y activándose inmediatamente solo cuando detectan circulación de agua. Hay marcas que tienen un sistema de seguridad con detección de oxígeno y con protección por falta de agua.
 

El uso de las termas a gas puede dar un ahorro de hasta 70% en gastos en comparación de una eléctrica. Si va a instalar una de ellas, evalúe los costos, usos, ventajas y desventajas en comparación con otro tipo de terma.

A la hora de bañarse

Uno de los artefactos que más electricidad demanda es la ducha eléctrica (equivale a 35 focos tradicionales de 100 watts/hora). Por ello, Eslava sugiere migrar hacia la terma eléctrica pues consume la mitad.

El costo promedio de la terma es S/.300, ya que se debe adquirir un cilindro para calentar el agua.

“La ducha eléctrica, que cuesta desde S/.20, al final sale más cara porque consume más corriente”, dice.

Asimismo, afirma que el escenario ideal sería contar con una terma a gas natural, pero este recurso aún se ofrece en pocas zonas de la capital y todavía no llega al interior del país.

“Mientras que, con la terma eléctrica, una familia de 4 personas gasta S/.30 al mes en promedio, con una terma a gas el costo sería de S/.8”, sostiene.

Por otro lado, recomienda no abrir constantemente la puerta de la refrigeradora, ya que la temperatura del ambiente obliga a que el motor consuma más energía. “En invierno se puede poner el termostato al mínimo, pues el clima está frío y así se consume menos”, comenta.